Mitología etrusca:
Los etruscos eran una raza de origen desconocido originarios del norte de Italia, quienes finalmente se integraron al Imperio romano. Muchas de las deidades en la lista siguiente formaron parte, eventualmente, de la mitología romana.Muy pocos textos etruscos han sobrevivido: sólo dos cortos e incompletos y un modesto número de inscripciones grabadas, el lenguaje etrusco como tal aún no es bien comprendido. Las obras de antiguos escritores latinos sobre religión etrusca habrían llenado los vacíos, si algunas de ellas hubiesen sobrevivido.Cualquier discusión moderna de la mitología etrusca tendrá que basarse en la publicación del Praenestine cistae: unas dos docenas de fascículos del Corpus Speculorum Etruscorum que ahora han aparecido. Específicamente, las figuras de culto y mitología etrusca aparecen en el Lexicon Iconographicum Mythologiae Classicae. Las inscripciones etruscas han recibido recientemente un tratamiento más serio de Helmut Rix, Etruskische Texte.La trinidad principal incluía a Tinia, Uni y Menrva.
Lista de figuras de la mitología etrusca:
Aquiles:En la mitología griega, Aquiles, nieto de Éaco (en griego antiguo Ἀχιλλεύς Αἰακίδης, Akhilleus Aiakidēs, también transliterado como Aquileo), fue un héroe de la Guerra de Troya y uno de los principales protagonistas y más grandes guerreros de la Ilíada de Homero. En la célebre obra homérica, Aquiles suele ser calificado como ‘el de los pies ligeros’, ya que se le consideraba el más veloz de los hombres.Leyendas posteriores (empezando por un poema de Estacio del siglo I) afirman que Aquiles era invulnerable en todo su cuerpo salvo en su talón. Estas leyendas sostienen que Aquiles murió en batalla al ser alcanzado por una flecha envenenada en el talón, de donde la expresión «talón de Aquiles» ha llegado a aludir a la única debilidad de una persona.Aquiles también es famoso por ser el más hermoso de los héroes reunidos en Troya, así como el más rápido. En su mito es crucial su relación con Patroclo, descrita en fuentes diferentes como profunda amistad o amor.
Aivas: También Eivas o Evas. Equivalente etrusco de los héroes griegos Áyax el Grande y Áyax el Menor.Ayax el grande, Áyax (en griego antiguo Αἴας Aías, ‘de la Tierra’) o Ayante, hijo de Telamón (Τελαμώνιος Telamốnios), rey de Salamina, es un legendario héroe de la mitología griega. Para distinguirlo de Áyax, hijo de Oileo se le llamaba Áyax el Grande, Gran Áyax o Áyax Telamonio. Su nombre viene, según la misma mitología, de la nominación de Hércules, amigo de Telamón, quien al ver que el aguila (Aías) de Júpiter, se posaba es su hombro le anunció: "Nacerá de ti, Telamón, el hijo que deseas y del nombre del ave que acaba de aparecérsenos le llamarán Ayax. Sorprenderá los pueblos en la luchas de Marte", según anotó el poeta Píndaro en Itsmina V. Su madre fue Scione, también de la isla de Salamina.Fue un valeroso guerrero, el más fuerte después de su primo Aquiles que se embarcó a la mítica Guerra de Troya al mando de doce navíos de Salamina acompañado de su hermano Teucro.[1] Tuvo como hijos suyos a Eantides son su esposa Glauca, y Eurísaces y Fileo, con su sierva Tecmesa. parece que el primer ancestro de la familia ateniense de los Filaidas.Peleó en la guerra con coraje y destreza y se suicidó al ser enloquecido por Atenea porque los griegos le negaron las armas de su amado primo, Aquiles. La tradición militar fue violada pues eran de quien las rescatara, y fueron a entregárselas a Odiseo, quien había complotado para obtenerlas.En la Ilíada de Homero se le describe como un guerrero de gran estatura y fuerza colosal, testarudo y de inmenso escudo que por sí mismo es un antemural de las falanges, segundo en destreza y valentía en la batalla únicamente por detrás de Aquiles. No fue herido en ninguna de las batallas relatadas en la Ilíada y es el único personaje de importancia en la obra que no recibió ayuda por parte de ninguno de los dioses griegos. Era por decirlo, el único heroe homérico, que debía todos su triunfos a su ser humano.Al igual que Aquiles, fue entrenado por el centauro Quirón. Áyax, era sin duda, uno de los reyes más importantes en el campo de batalla, aunque no tan sabio como Néstor, Idomeneo o Menesteo, ni tan hábil como Diomedes, Odiseo o Palamedes. Mandaba su ejército llevando una gran hacha de guerra y un enorme escudo, acompañado siempre por su hermano Teucro.Durante la guerra de Troya Áyax luchó con Héctor en dos ocasiones. La primera fue en un duelo que duró durante todo un día sin que hubiera un vencedor.[2] La segunda fue durante una incursión de los troyanos en el campamento de los aqueos cuando ambos pelearon en los barcos griegos. Áyax dejó casi muerto a Héctor arrojándole una piedra mayor que el propio príncipe troyano.[3] Ambos encuentros tuvieron lugar cuando Aquiles había abandonado el campo de batalla debido a su enfado con Agamenón y los griegos estaban desolados.Cuando Patroclo murió a manos de Héctor, los troyanos intentaron hacerse con su cuerpo y alimentar con él a los perros pero Áyax, uchó y logró proteger el cadáver y devolviéndolo al campamento griego y a su amigo Aquiles. Algo más tarde en la historia, cuando Aquiles muere tras ser alcanzado por una flecha de Paris, Áyax y Odiseo pelean por recuperar el cuerpo del héroe griego y enterrarlo junto al de su amigo Patroclo. Tras el funeral ambos héroes griegos reclaman la armadura de Aquiles como recompensa por sus esfuerzos. Tras una disputa de ingenio o tal vez porque Agamenón aborrecía el linaje de Éaco, Odiseo recibe la armadura y Áyax furioso cae al suelo. Cuando se levanta, estaba enloquecido de furia y en su delirio confunde un rebaño de ovejas con los líderes aqueos, Odiseo y Agamenón, matando a todos los animales. Atenea misma había intervenido creando la confusión y delirio del heroe, pues, es de los pocos que no va al combate implorando alguna protección divina. Cuando Áyax despierta de su locura, ve que ha deshonrado su espada de guerrerro con sangre de animales domésticos y decide quitarse la vida antes que vivir en la vergüenza y el oprobio. Para ello utiliza la espada de Héctor, que éste le había entregado como un ofrenda de honor tras su primer duelo.[4]En su nombre se celebraban en Salamina las fiestas Aiantes. Según la mitología posterior a Homero, de su sangre deramada nacío el Jacinto. La iniciales Ai, de su nombre, siempre tendrían para los griegos desde entonces, el sentido de suspiro y dolor.Versiones posteriores a la época homérica refieren que tras su muerte fue transformado en una flor de jacinto.[]Ayax el menor, En la mitología griega Áyax (en griego Αίας), hijo de Oileo rey de Lócrida, conocido como el Menor para diferenciarlo de Áyax I, hijo de Telamón quién era reconocido por su descomunal estatura.Lideró el destacamento de Locri durante la guerra de Troya, en la que tuvo un lugar importante.Fue uno de los guerreros que penetraron en la ciudad escondidos dentro del Caballo de Troya. Y en esta última batalla, junto con Neoptólemo, el hijo de Aquiles, se interna en el palacio real, donde el primero asesinó al rey Príamo, mientras que Ayax encontró a la princesa Casandra refugiada bajo un altar dedicado a Atenea. Y aunque esta pidiese piedad por respeto a la diosa, Ayax en el frenesí del saqueo no la escuchó y la violó allí mismo.Esto provoca la ira de Atenea, quién con ayuda de Poseidón hace que la nave de Ayax naufrague durante la fatídica tempestad que dispersa a la flota griega en su regreso a la patria.De ahí que de su muerte existen dos historias. La más difundida es que pereció ahogado cuando su barco se hundió al estrellarse contra un promontorio llamado las Rocas Giras en el mar Egeo. La otra sostiene que el agua lo dejó sobre una de estas piedras mientras estuvo inconsciente. Una vez la tormenta pasó y Ayax despertó, sabiendo que la tormenta era obra de Poseidón para castigarle por sus pecados, comenzó a burlarse del dios diciendo que por más esmero que hubiese puesto no había conseguido matarle. Para su desgracia, como si de una respuesta se tratase, una mano sosteniendo un tridente emergió de las aguas y se lo arrojó. El arma atravesó el pecho de Ayax y le ensartó a la roca, matándole al instante. Se dice que tan pronto como su alma le abandonó, el tridente y su cuerpo se transformaron en piedra y allí quedaron, como una roca alta que sobresale de las aguas del mar Egeo para el resto de los días.
Alpan: También Apanu. Diosa del amor y una de las Lasas, y gobernante del inframundo. Posible equivalente a la diosa griega Perséfone. En arte, era usualmente descrita como una doncella alada desnuda o semidesnuda.Persefone, En la mitología griega, Perséfone (en griego antiguo Περσεφόνη Persephónē ) era la reina del Inframundo por ser esposa de Hades (quien la raptó), la Core (Κόρη, ‘hija’) o joven doncella, hija de Deméter (ἡ Μητὴρ hê Mêtềr, ‘la madre’) y Zeus.Perséfone es su nombre en la literatura épica de la Grecia jónica. En otros dialectos era conocida por otros nombres, como Persephassa o Persephatta. Homero la llama Persephoneia (Περσεφόνεια). Los romanos tuvieron noticia de ella por primera vez a través de las ciudades eólicas y dóricas de la Magna Grecia, donde usaban la variante dialéctica Proserpina.De ahí que en la mitología romana fuese llamada Proserpina, y como tal llegase a convertirse en un personaje emblemático del Renacimiento.
Ani: Dios del cielo que vivía en los niveles más altos de la cúpula celestial. Estaría lingüísticamente vinculado al dios romano Jano. Su contraparte femenina era Ana.Jano, Jano (en latín Janus) es, en la mitología romana, un dios que tenía dos caras mirando hacia ambos lados de su perfil, padre de Fontus. Jano era el dios de las puertas, los comienzos y los finales. Por eso le fue consagrado el primer mes del año (que en español pasó del latín Ianuarius a Janeiro y Janero y de ahí derivó a Enero). Como dios de los comienzos, se lo invocaba públicamente el primer día de enero (Ianuarius), el mes que derivó de su nombre porque inicia el nuevo año. Se lo invocaba también al comenzar una guerra, y mientras ésta durara, las puertas de su templo permanecían siempre abiertas; cuando Roma estaba en paz, las puertas se cerraban. Jano no tiene equivalente en la mitología griega.Al igual que Prometeo, Jano es una suerte de héroe cultural, ya que se le atribuye entre otras cosas la invención del dinero, las leyes y la agricultura, según los romanos este dios aseguraba buenos finales.Dentro de los muchos apelativos que recibe el dios, vale la pena destacar dos: Jano Patulsio (patulsius) así era invocada la cara del dios que se ubicada delante de la puerta por quien deseaba atravesarla (para entrar o salir). Como complemento, la cara que se le opone a ésta del otro lado de la puerta, es invocada como Jano Clusivio (clusivius). Ambos nombres declaran la doble funcionalidad del dios.[cita requerida]Jano es citado en la novela de Albert Camus, La caida, donde simboliza la dualidad del personaje entre el pasado y el futuro.
Aplu: También Apulu. Dios del rayo y el trueno, regularmente descrito en el arte con una vara y ramas de laurel. Claramente se derivó del dios griego Apolo.Apolo, En la mitología griega y romana Apolo (en griego antiguo Ἀπόλλων Apóllōn o Ἀπέλλων Apéllōn) es uno de los más importantes y multifacéticos dioses olímpicos. El ideal del kurós (joven imberbe), Apolo ha sido reconocido variadamente como dios de la luz y el sol; la verdad y la profecía; el tiro con arco; la medicina y la curación; la música, la poesía y las artes; y más. Apolo es hijo de Zeus y Leto y hermano gemelo de la cazadora virgen Artemisa. Es conocido como Apulu en la mitología etrusca, influenciada por la griega. Apolo era adorado en la antigua religión griega y en la romana, así como en el neohelenismo moderno. Suele estar representado desnudo.Como patrón de Delfos (Apolo Pitio) era un dios oracular, la deidad profética del Oráculo de Delfos. La medicina y la curación estaban asociadas con él, ya fuera directamente o por mediación de su hijo Asclepio. También era visto como un dios que podía traer la enfermedad y la plaga mortal, además de tener el poder de curarla. Entre sus cargos custodios Apolo tenía dominio sobre los colonos y era el patrón defensor de rebaños y manadas. Como jefe de las Musas (Apolo Musageta) y director de su coro actuaba como dios patrón de la música y la poesía. Hermes creó la lira para él, y el instrumento se convirtió en un atributo común de Apolo. Los himnos cantados en su honor recibían el nombre de peanos.En la época helenística, especialmente durante el siglo III a. C., pasó como Apollo Helios a ser identificado por los griegos con Helios, dios del sol, y de forma parecida su hermana se equiparó con Selene, diosa de la luna.[1] Sin embargo, en los textos latinos Joseph Fontenrose se declaró incapaz de hallar mezcla alguna de Apolo con Sol entre los poetas augustos del siglo I, ni siquiera en las conjuraciones de Eneas y Latino en la Eneida.[2] Apolo y Helios/Sol permanecieron como seres separados en textos literarios y mitológicos hasta el siglo III.
Artume: También Aritimi, Artumes o Artames. Diosa de la noche, la luna y la muerte, así como de la naturaleza, los bosques y la fertilidad. Fue asociada con la diosa griega Artemisa.Artemisa, En la mitología griega, Artemisa o Ártemis (en griego antiguo Αρτεμις, quizá de αρτεμης, ‘sano y salvo’, de la raíz αρ, ‘encajar’) es la hija de Zeus y Leto, la hermana melliza de Apolo. Solía ser representada como una diosa virgen de la caza, llevando un arco y flechas. Más tarde pasó a estar asociada con la luna, como su hermano Apolo lo estaba con el sol. Fue una de las deidades más ampliamente veneradas y una de las más antiguas.[1] En épocas posteriores fue mezclada con la diosa Diana de la mitología romana.
Atunis: También Atuns. Es la encarnación etrusca de la popular deidad vida-muerte-renacimiento Adonis y consorte de Turan.Adonis, En la mitología griega Adonis (en griego antiguo Ἄδωνις Adônis). Originario de Fenicia, Adonis se extendió a todos los países del Mediterráneo con diversas modificaciones, si bien siempre retuvo aspectos semíticos, constituyendo una de las figuras de culto más complejas de la época clásica. Tuvo múltiples papeles y su significado y propósito en las creencias religiosas griegas han sido objeto de mucha investigación a lo largo de los siglos.Su equivalente semítico es Tammuz y el etrusco Atunis. (Algunos mitólogos creen que más tarde fue exportado a Germania, y que su equivalente en la mitología germánica es Baldur.) Su culto era femenino y se desarrolló en el círculo de jóvenes mujeres alrededor de Safo en Lesbos sobre el 600 a. C., como revela un fragmento de Safo.
Cautha: También Cath o Catha. Deidad solar, hija del mismo sol. También era diosa del inicio del amanecer, y también se mostraba surgiendo del océano. Ella también simboliza un nuevo comienzo.
Cel: También Cilens o Celens. Deidad terrestre, equivalente a la griega Gea. Representada como Ati Cel ("Padre Tierra") o Apa Cel ("Madre Tierra").Gea, Gea, Gaya, Tellus, Gaia ó Gé (en griego antiguo Γαῖα Gaĩa o Γαῖη Gaĩê, ‘suelo’ o ‘tierra’; en koiné Γῆ Gễ) es la diosa que personifica la Tierra en la mitología griega. Es una deidad primordial y ctónica en el antiguo panteón griego y se la consideraba una Diosa Madre o Gran Diosa. Su equivalente en el panteón romano era Terra. La Teogonía de Hesíodo cuenta[1] cómo, tras el Caos, surgió Gea la de anchos pechos, la eterna fundación de los dioses del Olimpo. De su propio ser, «sin la dulce unión del amor», trajo a Urano, el cielo estrellado, su igual, para cubrirla a ella y a las colinas, y también a Ponto, la infructuosa profundidad del mar. Pero tras esto, cuenta Hesíodo, yació con su hijo Urano y engendró a los Titanes Océano, Ceo, Crío, Hiperión y Jápeto, y a las Titánides Tea, Rea, Temis, Mnemósine, Febe la de la dorada corona y la hermosa Tetis. «Tras ellos nació Crono el astuto, el más joven y terrible de sus hijos, y éste odió a su lujurioso padre.» Hesíodo menciona que Gea concibió más descendencia con Urano. Primero los Cíclopes gigantes de un solo ojo, constructores de murallas, a los que posteriormente se les dieron nombres: Brontes (‘el que truena’), Estéropes (‘el que da el rayo’) y Arges (‘el que brilla’): «Había fuerza, poder y destreza en sus obras.» Luego añade los tres terribles hijos de cien manos de la Tierra y el Cielo, los Hecatónquiros, Coto, Briareo y Giges, cada uno con cincuenta cabezas.Urano escondió a cíclopes y hecatónquiros en el Tártaro, el mundo de las profundidades y la oscuridad, donde no pudieran ver la luz, y se regocijó de su maldad. Esto provocaba gran dolor a Gea (el Tártaro era su vientre), por lo que creó un pedernal gris (o adamanto) y de éste fabricó una gran hoz, y reuniendo a los titanes les pidió obediencia. Sólo Crono, el menor, se atrevió a tomar la hoz y castró a su padre cuando éste se acercó a Gea para yacer con ella. De las gotas de sangre y semen Gea concibió aún a más hijos: las fuertes Erinias, los Gigantes con armadura y las Melias (ninfas de los fresnos).Crono arrojó al mar los testículos de Urano, donde produjeron una espuma de la que nació Afrodita. Por esto, afirmaba Hesíodo, Urano llamó a sus hijos «Titanes», ‘los que abusan’, ya que «con temeraria sensatez habían cometido un acto terrible por el que luego tendrían justo castigo», pues tal como Urano había sido depuesto por su hijo Crono, así él mismo estaba destinado a ser derrocado por el suyo. Para evitarlo, se tragaba a sus hijos tan pronto como éstos nacían. Gea le dio a la esposa de Crono, Rea, la idea que salvaría a su último hijo, Zeus: dar a Crono una piedra envuelta en pañales que pareciese un bebé. Entonces Gea crió a Zeus (según algunas versiones de la historia), quien finalmente rescataría a sus hermanos y hermanas, tragados por Crono, y también liberaría a los Cíclopes, Hecatónquiros y Gigantes del Tártaro. Juntos, Zeus y sus aliados derrocarían a Crono.Tras la castración de Urano, Gea parió a Equidna y Tifón, engendrados por Tártaro. De Ponto tuvo a Nereo, Taumante, Forcis, Ceto y Euribia. Con Éter tuvo a Ergía, la diosa de la pereza y la holgazanería.Zeus escondía a una amante, Elara, de Hera ocultándola bajo la tierra. El hijo que tuvo de ésta, el gigante Ticio, es por tanto considerado a veces hijo de Gea, la diosa de la tierra, y de Elara.Gea también hizo inmortal a Aristeo.Se cree por algunas fuentes[2] que Gea fue la deidad original tras el Oráculo de Delfos. Traspasó sus poderes a, según la versión, Poseidón, Apolo o Temis. Apolo es el mejor conocido como poder tras el oráculo, muy reconocido ya en tiempos de Homero, tras haber matado al hijo de Gea Pitón en ese lugar y usurpado su poder ctónico. Hera castigó a Apolo por esto enviándolo a trabajar como pastor durante nueve años con el rey Admeto.Los juramentos prestados en nombre de Gea, en la antigua Grecia, estaban considerados entre los más sagrados.En el arte clásico Gea era representada de dos formas. En las vasijas pintadas atenienses se la mostraba como una mujer entrada en años, medio levantada del suelo, a menudo dando el bebé Erictonio (un futuro rey de Atenas) a Atenea para que ésta lo criase. Más tarde, en los mosaicos, aparece como una mujer reclinada sobre la tierra rodeada por un grupo de Karpoi, dioses infantes de los frutos de la tierra.
Charontes: Un tipo de demonio, posiblemente vinculado lingüísticamente a Caronte.Caronte, En la mitología griega, Caronte (en griego antiguo Χάρων Khárôn, ‘brillo intenso’) era el barquero de Hades, el encargado de guiar las sombras errantes de los difuntos recientes de un lado a otro del río Aqueronte si tenían un óbolo para pagar el viaje, razón por la cual en la Antigua Grecia los cadáveres se enterraban con una moneda bajo la lengua. Aquellos que no podían pagar tenían que vagar cien años por las riberas del Aqueronte, hasta que Caronte accedía a portearlos sin cobrar.Aunque con frecuencia se dice que porteaba las almas por el río Estigia, como sugiere Virgilio en su Eneida (libro VI, 369), según la mayoría de las fuentes incluyendo a Pausanias (x.28) y más tarde Dante (Inferno) el río que en realidad transitaba Caronte era el Aqueronte.Caronte era el hijo de Érebo y Nix. Se le representaba como un anciano flaco y gruñón de ropajes oscuros y con antifaz (o, en ocasiones, como un demonio alado con un martillo doble) que elegía a sus pasajeros entre la muchedumbre que se apilaba en la orilla del Aqueronte, entre aquellos que merecían un entierro adecuado y podían pagar el viaje (entre uno y tres óbolos). En Las ranas, Aristófanes muestra a Caronte escupiendo insultos sobre la gente obesa.Era muy raro que Caronte dejara pasar a un mortal aún vivo. Heracles, cuando descendió a los Infiernos sin haber muerto, no hubiera podido pasar de no haber empleado toda su fuerza para obligarle a cruzar el río, tanto a la ida como a la vuelta. rama de oro que proporcionaba la sibila de Cumas. Virgilio narra en la Eneida (libro VI) el descenso de Eneas a los Infiernos acompañado de dicha sacerdotisa.Otro mortal que logró «cruzar dos veces victorioso el Aqueronte» (Gérard de Nerval, Muchachas de fuego) es Orfeo, quien encantó a Caronte y a Cerbero para traer de vuelta al mundo a su amada muerta, Eurídice, a quien perdió definitivamente en su viaje de vuelta. Psique también logró hacer el viaje de ida y vuelta estando viva.Homero y Hesíodo no hacen ninguna referencia al personaje. La primera mención de Caronte en la literatura griega parece ser un poema Minio, citado por Pausanias. Dicho poema atribuye a la leyenda de Caronte un origen egipcio, como confirma Diodoro Sículo. Los etruscos mencionan también a un Caronte que acompañaba a Marte a los campos de batalla.Dante Alighieri incorporó a Caronte en La divina comedia (libro III, línea 78). Aquí era el mismo que su equivalente griego, pagándosele un óbolo para cruzar el Aqueronte. Es el primer personaje con nombre que Dante encuentra en el infierno, apareciendo en el tercer Canto del Infierno.
Charun: También Karun. Demonio que torturaba el alma de los muertos en el inframundo, y era también el guardián de la entrada al inframundo. Era descrito comúnmente como un demonio azul con nariz de buitre, orejas puntiagudas, cabello rojo y alas emplumadas. Mataba a la gente con un martillo o a veces con un hacha. En alguna oportunidad fue descrito como un hombre con cabello y barba rojos. Era el equivalente etrusco del dios griego Caronte.
Culsans: Dios de puertas y portales, correspondiente al dios romano de dos caras Jano.
Culsu: También Cul. Un demonio femenino del inframundo que estaba asociado con las puertas. Sus atributos incluían una antorcha y tijeras. Era regularmente representada cerca de Culsans.
Easun: Versión griega del legendario héroe griego Jasón.Jason, Jasón es un héroe mitológico griego. Según las diferentes versiones, su madre fue Alcímede, hija de Fílaco, o bien Polimede, tía de Ulises, aunque también son mencionadas Polimela, Eteoclímene, Polifeme o Teogneta.[1] Su padre fue Esón, rey de Yolcos hasta que su propio hermano, Pelias, lo destronó. Según otro relato, Esón confió el reino a su hermano Pelias, hasta que Jasón alcanzase la mayoría de edad. Un día que Pelias, tío pues de Jasón, fue a consultar sobre su futuro, fue advertido por el oráculo de que tuviera cuidado con un hombre calzado con una sola sandalia, porque pondría en peligro su trono.Jasón fue educado por el centauro Quirón hasta que fue adulto. Cuando cumplió los veinte años, se dirigió a Yolco dispuesto a recuperar el trono que por herencia le pertenecía. Vestía de manera extraña, cubierto con una piel de pantera, con una lanza en cada mano y con el pie izquierdo descalzo, según algunos porque había perdido una sandalia cruzando un río. Con esta indumentaria se presentó en la plaza pública de Yolco en el momento en que su tío Pelias se disponía a celebrar un sacrificio. Pelias no lo reconoció, pero sintió miedo por el extranjero descalzo. Jasón permaneció con su padre Esón cinco días y al sexto se presentó a Pelias y le reclamó el trono que legítimamente le pertenecía. Pelias decidió alejarlo de su tierra enviándolo a una difícil misión: viajar hasta la Cólquida (al pie del Cáucaso), y traer de allí el vellocino de oro, la piel de un carnero fabuloso que había salvado la vida a Frixo, antepasado de Pelias, y lo había trasladado a la Cólquida. Allí Frixo ofreció en sacrificio a Zeus este carnero y luego regaló la piel del animal, que era de oro, al rey Eetes. Éste lo consagró a Ares y lo depositó en un árbol custodiado por dos toros que arrojaban fuego por la boca y una serpiente que nunca dormía. Según otra versión, el propio Jasón, inspirado por Hera, se habría impuesto la realización de la prueba. Y es que, al presentarse ante Pelias, éste advirtió su pie descalzo y, comprendiendo el peligro que le anunciaba el oráculo, le preguntó qué castigo impondría a un individuo que conspirase contra su rey. Jasón contestó que lo enviaría a conquistar el vellocino de oro, respuesta que se volvió contra él.
Evan: Dios de la inmortalidad personal y uno de los Lasas. No está relacionado con los nombres célticos y hebreos más comunes de Evan.
Februus: En la Mitología romana, Februus era el dios de los muertos y la purificación. Fue también adorado por los etruscos, donde podría haberse convertido en Febris, dios de la malaria y la fiebre. Es, posiblemente, nombrado así en honor de las más antiguos Februa, (también Februalia y Februatio), las fiestas de la purificación.Éstas se celebraban más o menos al mismo tiempo que las lupercales, en honor de Fauno y de la loba que amamantó a Rómulo y Remo. Como resultado, se pensaba con regularidad que Fauno y Februus eran el mismo dios para los romanos. Februus es el dios romano de febrero, que fue nombrado así por el festival y se convirtió en el período de tiempo en el que se realizaban los rituales de purificación y se hacían sacrificios para expiar los pecados.
Feronia: Una oscura diosa rural, principalmente conocida por los varios cultos romanos que la adoraban.
Fufluns: También Puphluns. Dios de las plantas, la felicidad, la salud y el crecimiento en todas las cosas. Era el hijo de Semia y fue adorado en la Fufluna o Pupluna, que los romanos llamaron la Populonia. Fue adoptado brevemente por los romanos, pero fue reemplazado rápidamente por otros dioses itálicos de la fertilidad. Habría sido el equivalente de Baco (Dionisios) bajo el nombre de Pacha. Dionisios, En la mitología clásica, Dioniso (en griego antiguo Διώνυσος Diônysos o Διόνυσος Dionysos) es el dios del vino, inspirador de la locura ritual y el éxtasis, y un personaje importante de la mitología griega. Aunque los orígenes geográficos de su culto son desconocidos, casi todas las tragedias le presentan como «extranjero».[1]Fue también conocido como Baco (en griego antiguo Βακχος Bakkhos)[2] y el frenesí que inducía, bakcheia. Es el dios patrón de la agricultura y el teatro. También es conocido como el ‘Libertador’ (Eleuterio), liberando a uno de su ser normal, mediante la locura, el éxtasis o el vino.[3] La misión divina de Dioniso era mezclar la música del aulos y dar final al cuidado y la preocupación.[4] Los investigadores han discutido la relación de Dioniso con el «culto de las almas» y su capacidad para presidir la comunicación entre los vivos y los muertos.[5]En el panteón griego Dioniso fue incorporado como un hijo de Zeus y Sémele, nieto de Harmonía y bisnieto de Afrodita si bien otras versiones afirmaban que era hijo de Zeus y Perséfone. Se le describe como femenino o «masculino-femenino».[6]El nombre Dionysos es de significado incierto. Su elemento -nysos bien puede ser de origen no griego, pero dio- ha sido relacionado desde antiguo con Zeus (genitivo Dios). Para los autores griegos, Nisa era una ninfa que lo crió o la montaña donde era atendido por varias ninfas (las Nisíades), que le alimentaron y le hicieron inmortal por orden de Hermes.[7]El séquito de Dioniso era llamado el tíaso y estaba formado principalmente por ménades.
Hercle: También Herc o Horacle. Forma etrusca del héroe legendario conocido por los griegos como Heracles y por los romanos como Hércules, asociado con la fortaleza y el agua. La diferencia entre los nombres griegos y romanos de esta figura es el resultado de la influencia etrusca sobre los romanos.Heracles, En la mitología griega Heracles (en griego antiguo Ἡρακλῆς Hēraklēs, ‘gloria de Hera’) era un héroe y semidiós, hijo de Zeus y Alcmena y bisnieto de Perseo. En la mitología romana se le llamaba Hércules y en la fenicia Melkart. Puede decirse que fue el más grande de los héroes míticos griegos, el parangón de la masculinidad por excelencia, siendo su extraordinaria fuerza uno de sus atributos. Fue, según Pausanias, el último hijo que Zeus engendró con mujeres mortales en Grecia. Se cuentan muchas historias sobre su vida, siendo la más famosa Los doce trabajos de Heracles. Su equivalente etrusco era Hercle, un hijo de Tinia y Uni, y su equivalente egipcio era Herishef.Existen otras versiones acerca del nacimiento de éste héroe, siendo la más conocida aquella en la que se cuenta que es en realidad hijo de la diosa Hera y de Zeus, y que ésta envió a Heracles con Alcmena y Anfitrión convertido en mortal como venganza por las correrías amorosas de su marido. [cita requerida]Curiosamente, los sacerdotes vestían ropas femeninas en los templos dedicados a Heracles, posiblemente haciendo referencia al mito de Ónfale.Hercules, Hércules era el nombre en la mitología romana del héroe de la mitología griega Heracles, siendo una metátesis del nombre griego. Era hijo de Júpiter, el equivalente romano del dios griego Zeus, y la mortal Alcmena. Llevó a cabo doce grandes trabajos, llamados Los doce trabajos de Heracles y fue divinizado.Los romanos adoptaron la versión griega de su vida y trabajos sin cambios esenciales, pero añadieron detalles anecdóticos propios, algunos de ellos relacionando al héroe con la geografía del Mediterráneo occidental. Los detalles de su culto también fueron adaptados a España.
Horta: Diosa de la agricultura.
Laran: Dios de la guerra. En el arte, usualmente era retratado como un hombre joven desnudo con un casco y una lanza. La esposa de Laran era la diosa del amor Turan, reflejando la relación de Ares, y Afrodita, la equivalente de Turan.Ares, En la mitología griega, Ares (en griego antiguo Ἄρης Arês o Ἄρεως Areôs, ‘conflicto bélico’) se considera el dios olímpico de la guerra, aunque es más bien la personificación de la fuerza bruta y la violencia, así como del tumulto, confusión y horrores de las batallas,[1] en contraposición a su hermanastra Atenea, que representa la meditación y sabiduría en los asuntos de la guerra y protege a los hombres y sus habitaciones de sus estragos. Los romanos le identificaron con Marte, dios romano de la guerra y la agricultura (al que habían heredado de los etruscos), pero éste gozaba entre ellos de mucha mayor estima.Se le representa como hijo de Zeus y Hera, aunque existe una tradición posterior según la cual Hera lo concibió al tocar una determinada flor, en lo que parece ser una imitación de la leyenda sobre el nacimiento de Hefesto, y es recogida por Ovidio.[2] También existe una leyenda similar sobre el nacimiento de Eris, diosa de la Discordia. Su lugar de nacimiento y auténtico hogar estaba situado lejos, entre los bárbaros y belicosos tracios,[3] y a él huyó cuando fue descubierto acostándose con Afrodita.[4]Los helenos siempre desconfiaron de Ares,[5] quizá porque ni siquiera estaba influenciado por el espíritu de pertenecer a un bando, sino que a veces ayudaba a una parte y a veces a la otra, según le dictaban sus inclinaciones. Su mano destructiva se veía incluso tras los estragos provocados por plagas y epidemias.[6] Este carácter salvaje y sanguinario de Ares le hacía ser odiado por otros dioses, incluidos sus propios padres.[7]«Ares» fue también un adjetivo y epíteto en la época clásica: eran comunes los títulos Zeus Areios, Atenea Areia e incluso Afrodita Areia.[8]
Lasa: Plural Lasas. Dioses y diosas que acompañaban a Turan, diosa del amor, y servían como guardianes de las tumbas.
Lasa Vecu: Diosa de la profecía, asociada con la ninfa Vegoia.
Leinth: Diosa sin rostro que esperaba a las puertas del inframundo con Aita.
Lethans: También Letham. Diosa protectora del inframundo.
Losna: También Lusna. Deidad lunar, asociada con el océano y las mareas. Estaba relacionada probablemente con la diosa griega Leucótea.Leucotea, En la mitología griega Leucótea (en griego Λευκοθεα Leukothea, ‘diosa blanca’) era uno de los aspectos bajo los que conocía a una antigua diosa del mar. Las fuentes mitológicas coinciden en que fue una ninfa transformada.En la variante más familiar, Ino, la hermana de Sémele y esposa del rey Atamante, se convirtió en diosa después de que Hera la volviese loca como castigo por cuidar del recién nacido Dioniso. Ino saltó al mar con su hijo Melicertes en sus brazos. Por pena, aseguraban los helenos, los dioses olímpicos hicieron a ambos dioses del mar, transformando a Melicertes en Palemón, patrón de los Juegos Ístmicos, y a Ino en Leucótea.En la versión situada en Rodas puede detectarse un nivel mítico mucho más antiguo. Allí, la mujer que se arrojaba al mar y se convertía en Leucótea era Halia (‘del mar’), una ninfa local y uno de los telquines originarios de la isla que sucumbió a Poseidón, criado en la isla. Halia tuvo con él a Rodo y seis hijos. Afrodita hizo que éstos enloquecieran y violasen a su madre como venganza por una impía afrenta, por lo que fueron confinados bajo tierra por Poseidón. De esta forma los rodios seguían su ascendencia mítica hasta Rodo y el titán Helios. (Graves 1955)En la Odisea, Homero relata que Leucótea salvó la vida de Odiseo después de que Calipso le dejara regresar a su casa y le ofreciera para ello una endeble balsa. Poseidón, al ver la embarcación, la hizo añicos con la palma de su mano, sumergiéndose el héroe hasta el fondo del mar por el peso de las ricas ropas que llevaba. Pero su gran fortaleza física le permitió desembarazarse del lastre y salir a la superficie antes de morir ahogado. Allí le esperaba Leucótea, convertida en gaviota para despistar a Poseidón. Le ofreció un velo mágico que, atado a su cintura, le libraría de ahogarse si volvía a sumergirse. Odiseo le obedeció y, en lugar de aferrarse a los restos de la embarcación, se alejó nadando del lugar, lo que hizo que Poseidón no pudiera localizarle. Con ayuda de Atenea, que amansó los vientos, Odiseo logró nadar hasta la isla de los feacios, donde pudo descansar tras dos días de agotadora travesía.Leucótea tenía sus altares junto a los de Poseidón, siendo el principal el que se encontraba en Corinto. Tenía un santuario en Laconia donde contestaba las preguntas de la gente sobre sus sueños, siendo ésta su forma de oráculo. Puede comparársela con la etrusca Losna.Los romanos la adoraban con el nombre de Matuta, y acudían al templo que tenía dedicado en Roma para rogar por los hijos de sus parientes, nunca por los propios, pues Leucótea fue violada y humillada por sus hijos antes de ser inmortal. La entrada en el templo estaba reservada a las matronas romanas, prohibiéndosele a las esclavas bajo pena de muerte.Leucótea es La diosa blanca de Robert Graves.No debe ser confundida con Leucótoe, aunque a veces su nombre se deletree así.
Manía: Diosa de la muerte en la mitología etrusca y romana, no debe confundirse con la diosa griega de la locura, Mania. Gobernaba al lado de Mantus y se decía era la madre de Lares, Manes, fantasmas y otros espíritus de la noche.
Mantus: Dios del inframundo y esposo de Mania en las mitologías etrusca y romana. Estaban asociados con la ciudad de Mantua, que deriva su nombre de Mantus.
Maris: Dios de la agricultura y fertilidad y deidad salvadora. Posteriormente fue asociado con —y probablemente la fuente del nombre— del dios romano Marte. Marte a su vez fue asociado posteriormente con el dios griego Ares, incidiendo con el tiempo en que el aspecto agrícola de Marte encogiera en proporción a su aspecto de guerrero.Marte, En la mitología romana, Marte, en latín Marte, era el dios de la guerra, hijo de Júpiter en forma de flor y de Juno. Se le representaba como a un guerrero con armadura y con un yelmo encrestado. El lobo y el pájaro carpintero eran sus símbolos. Tuvo dos hijos con Venus: Fuga y Timor (respectivamente Deimos y Fobos para los griegos).El dios Marte proviene del Ares griego de Tracia, donde su culto no estaba muy difundido, y no tenía repercusiones morales o sociales. Ya existía, en cambio, esta deidad en Atenas, donde tenía un templo en el Areópago (en griego, ‘colina de Ares’).Antes de la guerra se le ofrecían sacrificios, y aparecía en las batallas acompañado por la diosa guerrera Duellona (para los griegos, Belona). Esta diosa era originalmente una divinidad sabina, de nombre Nerio, que más tarde fue identificada con Minerva. Llevaba un casco, un escudo, una lanza y una antorcha, por lo que también se identificó erróneamente con la diosa Enio, divinidad de la guerra. Hija de la hermana gemela de Marte, Eris diosa de la discordia.Marte dio nombre al cuarto planeta del sistema solar: Marte, al segundo (o tercero según algunas religiones, calendarios o regiones como en EE.UU.) día de la semana: Martes y al tercer mes del año: Marzo.
Menrva: También Menarva. Diosa de la sabiduría, la guerra, el arte, las escuelas y el comercio. Es la contraparte etrusca de la griega Atenas y la romana Minerva. Como Atenas, Menrva nació de la cabeza de su padre, Tinia. Menrva, Tinia y Uni eran parte de una tríada de dioses gobernantes. Menrva hallaba a los hombres desagradables.Minerva, En la mitología romana Minerva es la diosa de la sabiduría, las artes, las técnicas de la guerra, además de la protectora de Roma y la patrona de los artesanos. Se corresponde con Atenea en la mitología griega. Esta diosa era la hija favorita del Olimpo, que le había concedido varias de sus prerrogativas supremas. Tenía el don de profecía, prolongaba a voluntad la vida de los mortales, obtenía la felicidad tras la muerte: todo lo que ella disponía con un gesto de su cabeza era irrevocable, todo lo que prometía llegaba infaliblemente. Sus atributos eran la égida (el escudo adornado de la cabeza de la Gorgona), el olivar y la lanza. Minerva era hija de Júpiter, quien tras haber devorado a Metis, la Prudencia, sintió un gran dolor de cabeza. Recurrió a Vulcano, quien le abrió la cabeza de un hachazo, surgiendo de ella Minerva, armada y en una edad que le permitió ayudar a su padre en la Gigantomaquia (guerra contra los Gigantes), donde se distinguió por su valentía.Una de las características más famosas de la historia de Minerva es su desacuerdo con Neptuno para dar su nombre a la ciudad de Atenas. Doce grandes dioses, elegidos como árbitros, decidieron que quien produjera la cosa más útil para la ciudad le daría su nombre. Neptuno, de un golpe de tridente, hizo que la tierra diese un caballo y Minerva hizo crecer un olivar, lo que le dio la victoria.En la Guerra de Troya Minerva se mostró favorable con los aqueos después de que Paris la humillase al prefirir la belleza de Venus sobre la de Juno y la suya propia. La casta Minerva siguió siendo virgen, lo que no le impidió disputar el premio en el Juicio de Paris. Con el fin de triunfar sobre sus rivales, ofreció a su juez el conocimiento y la virtud. Sus ofertas fueron inútiles y concibió un gran despecho.A veces conduce a Ulises en sus viajes, a veces se digna enseñar a las hijas de Pandora al arte de destacar en los trabajos que convienen a las mujeres, a representar flores y combates en obras de tapicería, incluso es ella la que embellece de sus manos el abrigo de Juno. En una ocasión se enfrentó a Aracne para comprobar cuál de las dos tejía más rápido. Para demostrarlo, Minerva le propuso una labor: una tela magnífica. Cuando Minerva vio la superioridad de Aracne, fue víctima de tantos celos que decidió convertirla en una araña (según cuenta Ovidio en Las metamorfosis), hecho por el que se conoce a Minerva como una diosa cruel. Esta escena fue representada por Velázquez en su lienzo Las hilanderas, actualmente en el Museo del Prado (Madrid).Finalmente, es Minerva quien hace construir la nave de los argonautas según su dibujo, y quien coloca en su proa la madera que habla, cortada en el bosque de Dódona, la cual dirigía su rumbo, les informaba de los peligros y les indicaba los medios de evitarlos. Bajo esta metáfora es fácil reconocer el timón de la nave.
Nethuns: Dios de las fuentes, posteriormente se expandió a todos los tipos de aguas, incluido el mar. Supuestamente era el mismo que el dios griego Poseidón y el romano Neptuno. El nombre Nethuns estaría relacionado con el del dios celta Nechtan y el dios persa y védico que comparte el nombre Apam Napat.Poseidon, En la mitología griega, Poseidón o Posidón (en griego antiguo Ποσειδώνας) era el dios del mar y, como «Agitador de la Tierra», de los terremotos. El nombre del dios marino etrusco Nethuns fue adoptado en latín para Neptuno (Neptunus) en la mitología romana, siendo ambos análogos a Poseidón. Las tablillas en lineal B muestran que Poseidón fue venerado en Pilos y Tebas en la Grecia micénica de finales de la Edad del Bronce, pero fue integrado en el panteón olímpico posterior como hermano de Zeus y Hades. Poseidón tuvo muchos hijos y fue protector de muchas ciudades helenas, aunque perdió el concurso por Atenas contra Atenea. Le fue dedicado un himno homérico.
Nortia: En la mitología estrusca, Nortia fue la diosa del destino y la fortuna. Su atributo fue el clavo, el cual se clavaba al pared en sus templos durante el año nuevo. Aunque no hay ninguna mención de la diosa en textos etruscos, el historiador romano Tito Livio la menciona a ella y a la dedicación ritual asociada con ella: Minervae inventum sit. Volsiniis quoque clavos indices numeri annorum fixos in templo Nortiae, Etruscae deae, comparere diligens talium monumentorum auctor Cincius adfirmat. -- Livy vii. 3. 7.Traducida, dice algo al efecto de "Minerva es una inventadora/artesana. Los Veluceños (la gente etrusca de la ciudad de Veluzna), para indicar el paso del año nuevo, ponen clavos en el templo de Nortia, diosa etrusca, cual gran diligencia las obras del historiador Cincio también afirman."
Persipnei: En la Mitología etrusca Persipnei o Phersipnai (después Ferspnai) era la reina del inframundo y la equivalente a la diosa griega Perséfone y a la romana Proserpina. Ciertamente, su nombre fue tomado por los etruscos de los griegos. Proserpina, Proserpina (del latín proserpere, ‘emerger’) es una antigua diosa cuya historia es la base de un mito de la primavera. Es la equivalente en la mitología romana a la diosa griega Perséfone. Proserpina fue subsumida por el culto de Libera, una antigua diosa de la fertilidad, esposa de Liber. Es una deidad de vida, muerte y resurrección. Proserpina era la hija de Ceres y Júpiter, y se le describía como una joven sumamente encantadora.Venus, para dar amor a Plutón, envió a su hijo Amor (también conocido como Cupido) para que acertase a Plutón con una de sus flechas. Proserpina estaba en Sicilia, en el lago Pergusa (cerca de Enna), donde se bañaba, jugaba con algunas ninfas y recogía flores. Entonces Plutón surgió del cercano volcán Etna con cuatro caballos negros y la raptó para casarse con ella y vivir juntos en el Hades, el inframundo grecorromano, del que era gobernante. Plutón era también su tío, pues Júpiter y Ceres eran sus hermanos. Así pues, Proserpina es la Reina del Inframundo.Su madre Ceres, diosa de los cereales o la Tierra, marchó a buscarla en vano por todos los rincones del mundo, pero no logró hallar más que un pequeño cinturón que flotaba en un pequeño lago (hecho con las lágrimas de las ninfas). En su desesperación Ceres detuvo enfurecida el crecimiento de frutas y verduras,y se arrancó los vestidos y se arañó la cara, cayendo así una maldición sobre Sicilia. Ceres rehusó volver al Olimpo y empezó a vagar por la tierra, convirtiéndose en desierto lo que pisaba. Perdió su hoz en la ciudad de Trápani. Preocupado, Júpiter envió a Mercurio para que mandara a Plutón que liberase a Proserpina. Éste obedeció, pero antes de dejarla ir le hizo comer seis semillas de granada (un símbolo de fidelidad en el matrimonio), de forma que tuviese que vivir seis meses al año con él, pudiendo permanecer el resto con su madre. Ésta es pues la razón de la primavera: cuando Proserpina vuelve con su madre, Ceres decora la tierra con flores de bienvenida, pero cuando en el otoño vuelve al Hades, la naturaleza pierde sus colores.En otra versión de la historia, Proserpina comía sólo cuatro semillas de granada durante su rapto, y lo hacía por propia voluntad. Cuando Júpiter le ordenaba regresar, Plutón hacía un trato con él, diciendo que como Proserpina había robado sus semillas de granada, debía permanecer cuatro meses con él cada año en compensación. Por esta razón, en primavera cuando Ceres recibía a su hija, las cosechas brotaban y en verano florecían. En el otoño Ceres cambiaba las hojas a tonos de marrón y naranja (sus colores favoritos) como regalo para Proserpina antes de que volviese al inframundo. Durante la época en la que ésta vivía con Plutón, el mundo pasaba el invierno, una época en la que tierra era estéril.El mito de Proserpina, descrito principalmente por el romano Claudiano (siglo IV) está estrechamente relacionado con el de Orfeo y Eurídice: es Proserpina, como Reina del Hades, quien permite a Orfeo entrar y llevar de vuelta a la vida a su esposa Eurídice, muerta por una mordedura de serpiente. Proserpina tocaba su cítara para aplacar a Cerbero, pero Orfeo no respetaba su orden de nunca mirar atrás y perdía así a Eurídice.
Satres: Dios del tiempo y la necesidad. Descrito como un viejo que lleva una hoz y un reloj de arena. Equivalente al dios romano Saturno.Saturno, En la mitología romana Saturno (en latín Saturnus) era un importante dios de la agricultura y la cosecha. Fue identificado en la antigüedad con el dios griego Crono, entremezclándose con frecuencia los mitos de ambos.Aunque Saturno cambió enormemente con el tiempo debido a la influencia de la mitología griega, era también una de las pocas deidades claramente romanas que retuvieron elementos de su función original. Como escribió Thomas Paine:”Nos es imposible saber en qué momento comenzó la mitología pagana, pero es cierto, desde la evidencia interna que incluye, que no empezó en el mismo estado ni condición en el que terminó. Todos los dioses de esa mitología, salvo Saturno, eran de moderna invención. El supuesto reinado de Saturno fue anterior al que se llama mitología pagana, siendo hasta entonces una especie de teísmo que admitía la creencia en un solo Dios. Se supone que Saturno abdicó del trono en favor de sus tres hijos y una hija, Júpiter, Plutón, Neptuno y Juno; tras esto, miles de otros dioses y semidioses fueron creados imaginariamente, y el calendario de dioses creció tan rápido como el calendario de santos y el de cortes ha crecido desde entonces.” Saturno es el hijo menor de Coelus, el Cielo, y de la antigua Tellus, la Tierra. Tras derrocar a su padre, Saturno obtuvo de su hermano mayor Titán el favor de reinar en su lugar. Titán puso una condición: que Saturno debía matar a toda su descendencia, para que la sucesión del trono se reservase a sus propios hijos.Saturno se casó con Ops (Rea), con quien tuvo varios hijos que devoró ávidamente, como había convenido con su hermano. Sabiendo además que un día sería a su vez destronado por uno de sus hijos, exigía a su esposa que le diese a los recién nacidos. Sin embargo, Ops logró salvar a Júpiter. Éste, una vez adulto, hizo la guerra a su padre, derrotándole y expulsándole del cielo. Así la dinastía de Saturno perduró en detrimento de la de Titán.Se dice que Saturno quedó reducido a la condición de simple mortal, yendo a refugiarse al Lacio, donde puso orden entre los hombres salvajes y les dio leyes.
Selvans: También Selva. Dios de los bosques relacionado con el dios romano Silvano y asociado con el griego Sileno.Sileno, En la mitología griega Sileno (en griego Σειληνός o Σιληνός) era un viejo sátiro, dios menor de la embriaguez. Era el padre adoptivo, preceptor y leal compañero de Dioniso, el dios del vino, al tiempo que era descrito como el más viejo, sabio y borracho de sus seguidores. Su equivalente en la mitología romana era Silvano, cuyo nombre significa simplemente «de los bosques», y en la mitología etrusca Selvans.Sileno suele considerarse hijo de Hermes, como sucede con la mayoría de los sátiros, pero en otras tradiciones se le hace hijo de Pan con una ninfa, o de Pan con Gea. Como con Dioniso, se situaba su lugar de nacimiento en Nisa (Asia).Sileno conocido por sus excesos con el alcohol, pues su amor por el vino era su pasión. Por ello solía estar borracho y tenía que ser sostenido por otros sátiros o llevado en burro. Sin embargo los de su raza no podían seguir bebiendo indefinidamente como habrían querido, pues eran mortales como se deduce de sus tumbas, halladas tanto en la tierra de los hebreos como en Pérgamo.Se decía que cuando estaba ebrio Sileno poseía una sabiduría especial y el don de la profecía. El rey frigio Midas estaba ansioso por aprender de Sileno y capturó al anciano echando licor a una fuente de la que Sileno solía beber. Cuando cayó dormido, los sirvientes del rey le agarraron y llevaron a su señor. Sileno compartió con el rey una filosofía pesimista: que lo mejor para un hombre es no nacer, y que si nacía, debía morir lo más pronto posible.Una versión alternativa cuenta que, tras la muerte de Orfeo, Dioniso marchó a Frigia (algunos dicen que de camino a la India) seguido de su habitual séquito de sátiros y ménades, del que formaba parte Sileno. Éste, abrumado por la vejez y el vino, terminó por perderse y fue capturado por campesinos, quienes le llevaron ante el rey Midas, quien ya le conocía y se alegró mucho al verlo, pues tenía así la ocasión de celebrar una alegre fiesta. Se cuenta que Sileno y el rey (que también tenía una gran experiencia con el vino) estuvieron diez días y diez noches de fiesta, tras los cuales el anciano fue devuelto a Dioniso. Éste concedió un deseo a Midas en agradecimiento a su hospitalidad hacia su padre adoptivo. El rey pidió entonces el don de transformar en oro todo lo que tocase. Otra historia es que Sileno había sido capturado por dos pastores, a los que obsequió con historias asombrosas.Sileno contaba (aunque puede que lo soñase) que protegió al infante Dioniso de la ira de Hera, y que luego le ayudó durante la Gigantomaquia, matando al gigante Encélado, a quien se suele creer que aniquiló Atenea arrojándole encima la isla de Sicilia. Más tarde, persiguiendo a los piratas que había atacado a Dioniso, Sileno llegó a la isla que habitaba Polifemo. Allí fue apresado por los Cíclopes y hecho su sirviente, y allí seguía cuando Odiseo fue desviado por las tormentas a la isla, donde terminaría cegando a Polifemo para escapar.Se le atribuye, junto con Marsias, la invención de la flauta, así como de una danza particular, llamada en su honor el sileno.En la sátira de Eurípides Los cíclopes, Sileno es abandonado con los sátiros en Sicilia, donde han sido esclavizados por los cíclopes. Son los elementos cómicos de la historia, que es básicamente una versión teatral del libro IX de la Odisea de Homero. Sileno se refiere a los sátiros como sus hijos durante la obra.
Semia: Semia o Semla era, en la mitología etrusca, la diosa de la Tierra, madre de Fufluns, dios de las plantas, la felicidad y la salud. Semia está probablemente relacionada con la diosa griega Sémele, como indica su nombre Semla, pudiendo ser un equivalente directo.Semele, Sémele (en griego Σεμέλη) es un personaje perteneciente a la mitología griega y su contraparte romana era la diosa Stimula. Hija de Cadmo, rey de Tebas y Harmonía; es hermana de Ágave, Autónoe, Ino y Polidoro, pero se la conoce por ser la madre de Baco o Dioniso.Sémele recibía a Zeus secretamente en sus habitaciones. Recelosa Hera, esposa de Zeus, tomó forma de la vieja Béroe, nodriza de Sémele y acudió junto a ella. Intentó convencerla de que abandonara su relación con Zeus, pero al no conseguirlo decidió castigar a la atrevida amante de su esposo. Para ello empezó a decirle que su amante no era Zeus, sino un hombre corriente que se aprovechaba de su ingenuidad, que le pidiera alguna prueba de su divinidad.Dicho esto, se levanta de su trono y oculta por una dorada nube llega al umbral de Sémele; y no alejó la nube hasta que tomó la apariencia de una vieja. Se puso canas en las sienes, surcó de arrugas su piel, arrastró su encorvado cuerpo con tambaleantes pasos, puso también voz cascada,y era Béroe en persona, la nodriza epidaura de Sémele.Ovidio, MetamorfosisConvencida por fin, Sémele pidió a Zeus que le demostrara su poder, y éste, encantado porque Sémele iba a darle un hijo, le prometió concederle cuanto le pidiera; ella, aleccionada por Hera, le pidió que se le apareciera con todo su esplendor. Aunque Zeus intentó convencerla de que pidiera otra cosa, ella no quiso y Zeus tuvo que cumplir. Al aparecer en todo su esplendor de dios, los rayos que despedía abrasaron a Sémele.Hermes arrancó del vientre de Sémele al hijo nonato y lo cosió al muslo de Zeus. Varios meses después nació el niño, llamado Dioniso (‘dos veces nacido’) y también Diméter (‘el de dos madres’).Se dice que más tarde, Dioniso logró rescatarla del Hades, y la hizo inmortal dándole el nombre de Tione, en griego Θυωνη, ‘la ardiente’, hoy adorada como diosa del matrimonio. Para ello descendió por Lerna al Tártaro, donde sobornó a Perséfone con el regalo de un mirto para que dejase en libertad a su madre difunta, quien ascendió con él al templo de Artemisa en Trecén. El nombre lo acordó Dioniso con Zeus para evitar el enojo de Hera y los celos de otras almas. Una parte de la constelación llamada Corona Australis o Carcaj de Sagitario tiene el nombre de Trenza de Tione, en honor a la nueva diosa.
Sethlans: También Velchans. Dios del fuego y y la forja, regulamente portaba un hacha. Equivalente al griego Hefesto y el romano Vulcano.Hefesto, En la mitología griega, Hefesto (en griego Ἥφαιστος Hêphaistos, quizá de φαίνω phainô, ‘brillar’) es el dios del fuego y la forja, así como de los herreros, los artesanos, los escultores, los metales y la metalurgia. Era adorado en todos los centros industriales y manufactureros de Grecia, especialmente en Atenas. Su equivalente aproximado en la mitología romana era Vulcano.Hefesto era bastante feo, lisiado y cojo. Incluso se dice que,al nacer, Hera lo vio tan feo que lo tiro del Olimpo. Tanto es así, que caminaba con la ayuda de un palo y en algunas vasijas pintadas sus pies aparecen a veces del revés. En el arte, se le representa cojo, sudoroso, con la barba desaliñada y el pecho descubierto, inclinado sobre su yunque, a menudo trabajando en su fragua. La apariencia física de Hefesto indica arsenicosis, es decir, envenenamiento crónico por arsénico que provoca cojera y cáncer de piel. El arsénico se añadía al bronce para endurecerlo y la mayoría de los herreros de la Edad de Bronce habrían padecido esta enfermedad.
Tages: También Tarchies. Dios de la sabiduría. Comúnmente aparecía en tiempos de arado y enseñó a los etruscos la adivinación. Es el hijo o el nieto de Júpiter, o nació directamente de un lote recién arado. Era descrito con dos serpientes como piernas y algunas fuentes afirmaban que era un demonio
Taitle: Es la forma etrusca de la figura mitológica griega Dédalo.Dedalo, En la mitología griega, Dédalo (en griego Δαίδαλος Daídalos) era un arquitecto y artesano muy hábil, famoso por haber construido el laberinto de Creta. Dédalo tuvo dos hijos: Ícaro y Yápige.Dédalo construyó una amplia pista de baile para Ariadna (Ilíada xviii.591) y más tarde construyó un laberinto en el que estaba encerrado el Minotauro y del que escapó Teseo gracias al consejo de usar un hilo que le dio Ariadna.El laberinto era un edificio con incontables pasillos y calles sinuosas abriéndose unos a otras, que parecía no tener principio ni final. Dédalo lo construyó para el rey Minos, pero tras ello perdió el favor del rey y fue encerrado con su hijo Ícaro en una torre. El rey Minos quería el laberinto para encerrar en él al Minotauro, el hijo de su esposa Pasífae. Poseidón había maldecido a Pasífae y Dédalo le construyó una vaca de madera hueca para que pudiese aparearse con un toro.Dédalo consiguió escapar de su prisión, pero no podía abandonar la isla por mar, ya que el rey mantenía una estrecha vigilancia sobre todos los veleros y no permitía que ninguno navegase sin ser cuidadosamente registrado. Dado que Minos controlaba la tierra y el mar, Dédalo se puso a trabajar para fabricar alas para él y su joven hijo Ícaro. Enlazó plumas entre sí empezando por las más pequeñas y añadiendo otras cada vez más largas, para formar así una superficie mayor. Aseguró las más grandes con hilo y las más pequeñas con cera, y le dio al conjunto la suave curvatura de las alas de un pájaro.Cuando al fin terminó el trabajo, Dédalo batió sus alas y se halló subiendo y suspendido en el aire. Equipó entonces a su hijo de la misma manera y le enseñó cómo volar. Cuando ambos estuvieron preparados para volar, Dédalo advirtió a Ícaro que no volase demasiado alto porque el calor del sol derretiría la cera, ni demasiado bajo porque la espuma del mar mojaría las alas y no podría volar. Entonces padre e hijo echaron a volar.Pasaron Samos, Delos y Lebintos, y entonces el muchacho empezó a ascender como si quisiese llegar al paraíso. El ardiente sol ablandó la cera que mantenía unidas las plumas y éstas se despegaron. Ícaro agitó sus brazos, pero no quedaban suficientes plumas para sostenerlo en el aire y cayó al mar. Su padre lloró y lamentando amargamente sus artes, llamó a la tierra cercana al lugar del mar en el que Ícaro había caído Icaria en su memoria. Dédalo llegó sano y salvo a Sicilia bajo el cuidado del rey Cócalo, donde construyó un templo a Apolo en el que colgó sus alas como ofrenda al dios.Mientras tanto, Minos buscaba a Dédalo de ciudad en ciudad, proponiendo un acertijo: ofrecía una caracola espiral y pedía que fuese enhebrada completamente. Cuando llegó a Camico, el rey Cócalo, sabiendo que Dédalo sería capaz de resolver el acertijo, buscó al anciano. Éste ató un hilo a una hormiga que recorrió todo el interior de la concha, enhebrándola completamente. Minos supo entonces que Dédalo estaba en la corte del rey Cócalo y exigió que le fuese entregado. Cócalo logró convencerlo para que tomase primero un baño, y sus hijas le mataron entonces quemándolo con agua hirviendo.Dédalo estaba tan orgulloso de sus logros que no podía soportar la idea de tener un rival. Su hermana había dejado a su hijo Perdix a su cargo para que aprendiese las artes mecánicas. El muchacho era un alumno capaz y dio sorprendentes muestras de ingenio. Caminando por la playa encontró una espina de pescado. Imitándola, tomó un pedazo de hierro y lo cortó en el borde, inventando así la sierra. Unió dos trozos de hierro por un extremo con un remache y afiló los extremos opuestos, haciendo así un compás. Dédalo tenía tanta envidia de los logros de su sobrino que cuando un día estaban juntos en lo alto del templo de Atenea en la Acrópolis, aprovechó la oportunidad y lo empujó. Pero la diosa, que favorece al ingenio, le vio caer y cambió su destino transformándole en un pájaro bautizado con su nombre, la perdiz. Este pájaro no hace su nido en los árboles ni vuela alto, sino que anida en los setos y evita los lugares elevados, consciente de su caída. Por este crimen Dédalo fue juzgado y desterrado.Dédalo dio su nombre epónimamente a cualquier artesano griego y a muchos artilugios griegos que representaban hábiles técnicas. En Platea (Beocia) había un festival, la Pequeña Daedala, en la que se derribaba un roble del que se tallaba una imagen que se vestía con ropas nupciales y que se llevaba en una carreta tirada por bueyes con una mujer que hacía de novia hasta el río Asopo. La figura se llamaba Daedale y el arcaico ritual se explicaba con un mito: Hera había abandonado enfadada a Zeus y éste, para lograr que volviese, anunció que iba a casarse y vistió un muñeco para imitar una novia. Hera se unió a la procesión de la boda, rasgó el velo de la falsa novia y, al descubrir el ardid, se reconcilió con su marido. Las imágenes se guardaban tras cada fiesta, y cada sesenta años un gran número de ellas se llevaban en procesión a lo alto del monte Citerón, donde se construía un altar de madera y se quemaban junto con animales y el propio altar.En alusión a esta figura mitológica en 1970 se le llamó «Daedalus» a un cráter lunar situado en el centro del lado oscuro de la Luna.[1]
Tarchon: Un héreo etrusco que, con su hermano, Tyrrhenus, fundó la federación etrusca de 12 ciudades.
Tecum: Dios de los lucomenes, o clase gobernante.
Thalna: Thalna era, en mitología etrusca, la diosa de los nacimientos y partos, y la mujer de Tinia.Se la representaba artísticamente como una mujer joven. También se la suele identificar con la diosa Uni.Uni, En la Mitología Etrusca, Uni es la suprema diosa, equivalente a la diosa griega Hera o la romana Juno. Junto a su marido Tinia y a la diosa Menrva forma un importante trío de deidad en esta mitología. Casada con Tinia tuvo como hijo al dios etrusco Hercle, el equivalente de esta mitología a Heracles en la mitología griega y a Hércules en la romana.Hera, En el panteón olímpico de la mitología griega clásica, Hera (en griego antiguo —ático— Ἧρα, Hêra, en jónico y griego homérico Ἧρη, Hêrê) era la esposa y hermana mayor de Zeus. Su principal función era presidir como diosa de los nacimientos y el matrimonio. Su equivalente en la mitología romana era Juno. Hera, queriendo dar un buen ejemplo a los dioses y mortales, eligió la vaca como uno de sus emblemas, porque son los animales más maternales. No queriendo ser vista tan simple como la vaca, también eligió al pavo real y el león.[1]Hera era hija de Rea y Crono, y fue tragada al nacer por éste debido a una profecía sobre que uno de sus hijos le arrebataría el trono. Zeus se salvó gracias a un plan urdido por Rea y Gea: la primera envolvió una piedra en pañales y se la dio a Crono en su lugar. Mientras tanto, Zeus fue llevado a una cueva en Creta. Más tarde Rea dio a Crono un hierba que según le dijo le haría completamente invencible, pero en realidad le hizo regurgitar a los otros cinco olímpicos: Hestia, Deméter, Hera, Hades y Poseidón, así como la piedra. Cuando Zeus creció, desterró a Crono al Tártaro, la sima más profunda del inframundo, pues los Titanes eran inmortales y no podía matárseles.Se representa a Hera majestuosa y solemne, a menudo en el trono y coronada con el polos (una alta corona cilíndrica usada por varias de las Grandes Diosas), pudiendo llevar en su mano la granada, símbolo de la fértil sangre y la muerte, y sustituto de la cápsula narcótica de la amapola.[2] El investigador Walter Burkert escribió en Religión griega: «Sin embargo, hay registros de una representación anterior sin iconos, como una columna en Argos y una tabla en Samos.»[3]Hera fue muy conocida por su naturaleza celosa y vengativa, principalmente contra las amantes y la descendencia de Zeus, pero también contra los mortales con los que se cruzaba, como Pelias. Paris, quien la ofendió al elegir a Afrodita como la diosa más bella, se ganó así su odio.
Thesan: Thesan era, en la mitología etrusca, la diosa del amanecer, asociada con la generación de vida.Estaba identificada con la romana Aurora y la griega Eos.Eos, En la mitología griega Eos (en griego antiguo Ἠώς Êós o Έως Eos, ‘aurora’) era la diosa titánide[1] de la aurora, que salía de su hogar al borde del océano que rodeaba el mundo para anunciar a su hermano Helios, el Sol.Se cree que la adoración griega de la aurora como diosa fue heredada de la época indoeuropea. El nombre «Eos» es un cognado del latín Aurora y del sánscrito védico Ushás. En la mitología hindú también hay un dios menor de la aurora llamado Aruná, conductor del carro de oro de Surya, el dios del Sol.
Thethlumth: Dios del destino y el inframundo.
Thufltha: O Thuflthas. Una Erinyes, que infligía el castigo en nombre de Tinia.
Tinia: En la mitología etrusca, Tinia o Tin era el más alto dios de los cielos, marido de Thalna o Uni.Era parte de un poderoso triunvirato de dioses, incluyendo a Menrva y a Uni. Se le asociaba con los rayos, las lanzas y los cetros. En lenguaje etrusco, tin o tinš significa día y su plural es tinia, lo que nos muestra que es el dios que gobierna el paso del tiempo.Junto con Uni, era el padre de Hercle.Tinia era el equivalente al dios romano Júpiter y al dios griego Zeus. Aparece en distintas variantes, tal y como aparece en el En una hígado de Piacenza, un modelo en bronce de un hígado utilizado para la adivinación.Algunos de sus otros nombres son Tin Cilens y Tin Θuf.Algunas de las inscripciones en las que aparece son:En una pintura de Oltos (aproximadamente sobre el año 500 a. C.): Itun turuce venel atelinas Tinas cliniiaras. (Esto ha dado Venel Aterlinas para los hijos de Tin) En la Quimera de Arezzo: Tinscvil (Un regalo para Tinia). Zeus, En la mitología griega Zeus (en griego antiguo Ζεύς Zeús) es el «padre de los dioses y los hombres»,[1] que gobernaba a los dioses del monte Olimpo como un padre a una familia, de forma que incluso los que no eran sus hijos naturales se dirigían a él como tal.[2] Era el Rey de los Dioses que supervisaba el universo.[3] Era el dios del cielo y el trueno. Sus atributos incluyen el rayo, el águila, el toro y el roble. Además de su herencia indoeuropea, el clásico Zeus «recolector de nubes» también obtuvo ciertos rasgos iconográficos de culturas del antiguo Oriente Próximo, como el cetro. Zeus fue frecuentemente representado por los artistas griegos en dos poses: de pie, avanzando con un rayo levantado en su mano derecha, y sentado majestuosamente.Hijo de Crono y Rea, era el más joven de sus descendientes. En la mayoría de las tradiciones aparece casado con Hera, aunque en el oráculo de Dódona su esposa era Dione, con quien según la Ilíada fue padre de Afrodita.[4] Es conocido por sus numerosas aventuras y amantes, fruto de las cuales fueron muchas deidades y héroes, incluyendo Atenea, Apolo y Artemisa, Hermes, Perséfone, Dioniso, Perseo, Heracles, Helena, Minos y las Musas. Con Hera suele decirse que fue padre de Ares, Hebe y Hefesto.[5]En griego el nombre del dios es Ζεύς Zeús en el caso nominativo y Διός Diós en el genitivo. Las formas más antiguas del nombre son las micénicas di-we y di-wo, escritas en lineal B.[6]Su equivalente en la mitología romana era Júpiter y en la etrusca Tinia.
Tiv: O Tivr. Deidad lunar, posiblemente relacionada al germánicno Tyr.Tyr, Tyr (nórdico antiguo: Týr) es el dios de la guerra y batalla en la mitología nórdica, descrito como el hombre de una sola mano. Según la Edda Mayor es hijo del gigante Hymir y de Frilla, en su Edda Menor Snorri Sturluson lo descirbe como hijo de Odín y de Frigg. Los nombres correspondientes en idiomas germánicos incluyen Tyz (godo), Ty (noruego antiguo), Ti (sueco antiguo), Tiw, Tiu or Tew (inglés antiguo) y Ziu (antiguo alto alemán).
Tluscva: La pareja de deidades terrestres Tellus y Tellumo.Tellus, Tellus o Terra (‘tierra’ en latín) era una diosa que personificaba la Tierra en la mitología romana. A veces era llamada Tellus Mater o Terra Mater, siendo Mater un título honorífico aplicado también a otras diosas. Era mencionada a menudo en contraste con Júpiter, el dios del cielo, y estaba relacionada con Dis y los Manes. Su equivalente en la mitología griega era Gea, y como tal se decía que era la madre de Fama, la diosa de los rumores y la fama.
Tuchulcha: Demonio femenino del inframundo. Era parte humana y parte burro y tenía le cabello de serpientes y pico de buitre.
Turán: Diosa del amor y la vitalidad, patrona de la ciudad etrusca de Vulci. Usualmente se le describía como una joven muchacha alada en las obras de arte. Las palomas y los cisnes negros eran sus animales sagrados, y su séquito se llamaban las Lasas. También era la esposa de Maris. Se asociaba con la griega Afrodita y la romana Venus.Venus, Venus era una importante diosa romana relacionada principalmente con el amor, la belleza y la fertilidad, que desempeñaba un papel crucial en muchas fiestas y mitos religiosos romanos. Desde el siglo III a. C., la creciente helenización de la clases altas romanas la identificó como equivalente de la diosa griega Afrodita. De esta forma Venus fue la esposa de Vulcano. Virgilio, como halago a su patrón Augusto y al gens Julia hizo a Venus, a quien Julio César adoptó como su protectora, ancestro del pueblo romano a través de su legendario fundador Eneas y su hijo Iulus.
Turms: Dios del comercio y la mercancía, y mensajero de los dioses. Uno de sus aspectos, el Turns Aitas, era el líder de los muertos. Comúnmente se describía con zapatos alados y sombrero heráldico, casi idéntico al de Hermes y Mercurio.Hermes, En la mitología griega Hermes (en griego antiguo Έρμῆς) es el dios olímpico mensajero, de las fronteras y los viajeros que las cruzan, de los pastores y las vacadas, de los oradores y el ingenio, de los literatos y poetas, del atletismo, de los pesos y medidas, de los inventos y el comercio en general, de la astucia de los ladrones y los mentirosos.[1] El himno homérico a Hermes le invoca como el «de multiforme ingenio (polytropos), de astutos pensamientos, ladrón, cuatrero de bueyes, jefe de los sueños, espía nocturno, guardián de las puertas, que muy pronto habría de hacer alarde de gloriosas hazañas ante los inmortales dioses.»[2]
Tvath: Diosa de la resurrección y el amor por los muertos, relacionada a la griega Deméter.Demeter, Deméter o Demetra (en griego antiguo Δημήτηρ o Δημητρα, ‘diosa madre’ o quizás ‘madre distribuidora’, quizá del sustantivo indoeuropeo *dheghom *mater) es la diosa griega de la agricultura, nutricia pura de la tierra verde y joven, ciclo vivificador de la vida y la muerte, y protectora del matrimonio y la ley sagrada. Se la venera como la «portadora de las estaciones» en un himno homérico, un sutil signo de que era adorada mucho antes de la llegada de los olímpicos. El himno homérico a Deméter ha sido datado sobre el siglo VII a. C.[1] Junto a su hija Perséfone eran los personajes centrales de los misterios eleusinos que también precedieron al panteón olímpico.En la mitología romana se asociaba a Deméter con Ceres. Cuando se le dio a Deméter una genealogía, se dijo que era hija de Crono y Rea, y por tanto hermana mayor de Zeus. A sus sacerdotisas se les daba el título de Melisas.Es fácil confundir a Deméter con Gea o Rea, y con Cibeles. Los epítetos de la diosa revelan lo amplio de sus funciones en la vida griega. Deméter y Core (‘la doncella’) solían ser invocadas como to theo (‘las dos diosas’), y así aparecen en las inscripciones en lineal B del Pilos micénico en tiempos pre-helénicos. Es bastante probable que existiese una relación con los cultos a diosas de la Creta minoica.Según el retórico ateniense Isócrates, los mayores dones que Deméter daba a los atenienses eran el grano, que hacía al hombre diferente de los animales salvajes, y los misterios eleusinos, que le daban mayores esperanzas en esta vida y en la otra.[2]
Tyrrhenus: Héroe de la cultura etrusca y gemelo de Tarchon.
Uni: Diosa suprema de la mitología etrusca, esposa de Tinia, madre de Hercle y patrona de Perugia. Con Tinia y Menrva, era miembro de la tríada gobernante de las deidades etruscas. Uni era el equivalente a la romana Juno, cuyo nombre habría derivado de Uni, y la griega Hera.
Usil: Dios del sol.
Vanth: Demonio del inframundo con alas con ojos. Era el omnisciente heraldo de la muerte, asistía a las personas agonizantes en sus lechos de muerte e inhalaba a los demonios buenos. En tiempos posteriores, representaba a la justicia. En el arte, era descrita con imágenes como serpientes, antorchas y llaves.
Veive: Dios de la venganza y asociado a Maris. En el arte, era descrito como un joven que sostenía una corona de laurel y algunas flechas, parado al lado de una cabra
Veltha: También Voltumna. Dios ctónico (perteneciente a la tierra) del mito etrusco, quien posteriormente se convirtió en el supremo dios etrusco. Era el patrón de la raza de la civilización etrusca. Su culto estaba centrado en Volsini. Era el equivalente a la deidad estacional romana de Vertumnus.
Vetis: Dios del inframundo de la muerte y la destrucción.
Vicare: Hijo de Taitle, derivado de la figura mitológica griega Ícaro.Icaro, En la mitología griega, Ícaro (en griego antiguo Ἴκαρος Ikaros) es hijo del arquitecto Dédalo, constructor del laberinto de Creta, y de una esclava. Fue encarcelado junto a él en una torre de Creta por el rey de la isla, Minos.Dédalo consiguió escapar de su prisión, pero no podía abandonar la isla por mar, ya que el rey mantenía una estrecha vigilancia sobre todos los veleros, y no permitía que ninguno navegase sin ser cuidadosamente registrado. Dado que Minos, el rey, controlaba la tierra y el mar, Dédalo se puso a trabajar para fabricar alas para él y su joven hijo Ícaro. Enlazó plumas entre sí empezando por las más pequeñas y añadiendo otras cada vez más largas, para formar así una superficie mayor. Aseguró las más grandes con hilo y las más pequeñas con cera, y le dio al conjunto la suave curvatura de las alas de un pájaro. Ícaro, su hijo, observaba a su padre y a veces corría a recoger del suelo las plumas que el viento se había llevado, y tomando cera la trabajaba con su dedos, entorpeciendo con sus juegos la labor de su padre. Cuando al fin terminó el trabajo, Dédalo batió sus alas y se halló subiendo y suspendido en el aire. Equipó entonces a su hijo de la misma manera, y le enseñó cómo volar. Cuando ambos estuvieron preparados para volar, Dédalo advirtió a Ícaro que no volase demasiado alto porque el calor del sol derretiría la cera, ni demasiado bajo porque la espuma del mar mojaría las alas y no podría volar. Entonces padre e hijo echaron a volar.Pasaron Samaos, Delos y Lebintos, y entonces el muchacho comenzó a ascender como si quisiese llegar al paraíso. El ardiente sol ablandó la cera que mantenía unidas las plumas y éstas se despegaron. Ícaro agitó sus brazos, pero no quedaban suficientes plumas para sostenerlo en el aire y cayó al mar. Su padre lloró y lamentando amargamente sus artes, llamó a la tierra cercana al lugar del mar en el que Ícaro había caído Icaria en su memoria. Dédalo llegó sano y salvo a Sicilia bajo el cuidado del rey Cócalo, donde construyó un templo a Apolo en el que colgó sus alas como ofrenda al dios.Pausanias cuenta una versión más prosaica (Beocia, xi.4) en la que ambos huían a Creta en barco, para lo cual Dédalo inventa el principio de la vela, desconocido hasta entonces para los hombres. Ícaro, navegante torpe, naufragó frente a la costa de Samos, en cuyas orillas se encontró su cuerpo. Heracles le dio sepultura en esa tierra que desde entonces se llama Icaria.
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